Victoria divisional
Photo by Andy Lyons/Getty Images
Después de terrible descalabro y como la vida sigue, pasaron reglamentarios seis días y el domingo llegó. Era el momento de jugar un partido más con la mirada y la atención en lo que concernía.
Los juegos divisionales no suelen ser sencillos, el hecho que se enfrenten los equipos dos veces por temporada les da un conocimiento de las fuerzas y debilidades del adversario. En las últimas temporadas Cincinnati había sido un rival difícil contra quien se disputaba el liderato de la división. Como es de esperarse la rivalidad es fuerte al punto en que en declaraciones Carson Palmer ha dicho que el equipo al que más odia en la NFL son los Acereros de Pittsburgh (uhh).
Esta campaña los gatitos se han desinflado y sin pretextos, tienen a sus jugadores, ahora no hay excusa de que Palmer ande lastimado, que hayan cambiado de entrenador,
que no tengan a sus jugadores estrella, simplemente se desinflaron y como resultado se encuentran en el fondo de la división con dos juegos ganados y 6 perdidos (el día de hoy perdieron contra los Bills de Búfalo) y eso no lo podíamos ignorar ni desaprovechar.
Los partidos siguientes en el calendario para los Steelers son también partidos divisionales, contra los cuervos de Baltimore y los cafés de Cleveland ambos en casa.
Sobre el partido contra Baltimore hay expectación y se hablará de esto en otro post, mientras tanto no nos queda más que decir que
GO STEELERS!!!!
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